Consejos y tips para que el orden y la limpieza reinen en tu casa
Si eres de las personas que les cuesta mantener la casa ordenada, de los que cuando llegan del trabajo, cansados y con ganas de descansar, ves que las cosas están tiradas por acá y por allá, ropa sucia encima de los muebles, platos sin lavar desde el día anterior… y si agregamos que hayan niños la situación es peor. Con cansancio del día son muy pocas las ganas que hay de acomodar nada, y lo peor es que cada día aumenta el desorden. ¿A quién le gusta vivir así?
En este artículo te daremos algunas sugerencias para que no haya más desastres,mantengas las habitaciones arregladas y limpias por más tiempo y a la vez para mantener decorado tu hogar. Para tener la casa ordenada necesitas sólo dos cosas, un esfuerzo inicial y luego un compromiso mínimo.
Una primera sugerencia que podríamos darte es que le dediques al menos 10 minutos de tu tiempo para limpiar y organizar, y de ese modo ahorrarás tiempo y energía para no agobiarte en la limpieza general los fines de semana. El desorden atrae más desorden. Dejar cosas tiradas en el suelo de tu habitación y en lugares que no deberían estar hará que en poco tiempo este desorden se expanda, como por arte de magia, por toda la casa. Si por aquí está desordenado, poco nos importará si por otro lado también lo esté.
En cambio si un zona de la casa está ordenada habrá más fácilmente que queramos que las otras zonas también lo estén. Todo lo que uses, saques, traigas, una vez que no lo necesites enseguida, guárdalo de una vez. Por ejemplo, si llegas de hacer las compras, saca todos los productos y guárdalos enseguida en la nevera o en la alacena, en los lugares que les corresponde, y las bolsas ponlas dobladas y bien acomodadas de una vez en el cajón que asignaste para eso.
Una vez que termines de comer, recoge todo de la mesa y llévalo directo al fregadero, lávalos y guárdalos en el lugar correspondiente.Cuando llegues de la calle y te pones la ropa cómoda para estar en casa, guarda la que usaste enseguida y ordenadamente en el armario.
Y así con todo.
No acumules nada, y eso te servirá para cualquier cosa en la vida. Lo que no sirve, bótalo. Una actitud ideal, que nos proviene del minimalismo y de la decoración zen es tener lo mínimo posible, mientras menos cosas se tenga en la casa, mejor, así se te hará más fácil mantener el orden. Al momento de limpiar una mesa, por ejemplo, es más rápido y fácil pasarle un trapo si está vacía a que si está con un montón de cosas encima. Una sala con muy pocas cosas se limpia en pocos minutos.
Cronometra tu tiempo de limpieza. Los fines de semana, por lo general, son para descansar y mantenerse en relax, de modo que seguramente no querrás pasarte todo un domingo limpiando y acomodando tu casa, de modo que ponle un límite de tiempo para cada cosa. Por ejemplo, para el baño dedícale 20 minutos, para la cocina 25 minutos, 10 minutos para la sala, y así. Incluso puedes usar una alarma o un timer, de ese modo también harás algo de ejercicio, y sólo usarás quizá sólo media mañana para toda la casa, y tengas el resto del día para relajarte.